martes, 13 de septiembre de 2011

Categorización 2011

Estimad@s docentes investigador@s UNTREF:

La Secretaría de Políticas Universitarias informó la apertura de una convocatoria extraordinaria para categorización 2011 que se desarrollará entre el 3 y 31 de octubre del corriente.

En tal sentido les enviaremos dos archivos:

1.- "Encuadre general y criterios de la convocatoria categorización 2011". Se recomienda atender particularmente a "quienes" pueden presentarse.

2.- "Orientaciones técnicas y preguntas frecuentes 1 categorización 2011" para elaborar la ficha docente y la solicitud de categorización.

Para acompañarlos y canalizar inquietudes hemos creado una dirección de mail específica:
categorizacion@untref.edu.ar

Les pedimos que por este tema escriban siempre a la dirección indicada y responderemos según corresponda al tipo de pregunta:

Sobre cuestiones relativas a información del currículum, responderemos Elizabeth Martinchuk y Nora Graziano.

Sobre cuestiones de orden técnico- operativo, responderá Martín Rodriguez.

Los horarios para consulta telefónica y personal sobre cuestiones generales son los habituales de la oficina:

Lunes y Viernes de 9 a 14 hs.
Martes y Miércoles de 9 a 18 hs.
Jueves 9 a 12 hs.


Los horarios telefónicos y para consulta personal sobre cuestiones técnicas operativas son:

Martes de 14 a 18hs y Jueves de 9 a 12hs.

Como siempre estamos a disposición para acompañarlos y aprovechar una nueva oportunidad de reconocimiento de la trayectoria de los docentes-investigadores de nuestra universidad. Cuenten con nosotr@s. Cordialmente.

Mg. Nora Graziano

Programa de Incentivos a la Investigación - UNTREF

4575-5014/15 int. 118
Valentín Gomez 4755 (1678), Caseros.
Sede Caseros II, 6to piso (Secretaría Académica)
Lunes y Viernes de 9 a 14 hs.
Martes y Miércoles de 9 a 18 hs.
Jueves 9 a 12 hs.


Presentación de “Tantas Voces... Tantas Vidas - 5 años de la desaparición de Jorge Julio López”

El martes 13 en la Ciudad de Buenos Aires y el viernes 16 en La Plata, la Asociación de Ex Detenidos- Desaparecidos (AEDD) realizará la presentación de un nuevo número de la revista Tantas Voces... Tantas Vidas. Este número será un especial al cumplirse 5 años de la desaparición de Jorge Julio López, testigo y querellante en el juicio que condenó por genocidio al represor Miguel Etchecolatz. Para la AEDD, esta publicación “es una suerte de abrazo ineludible con Jorge Julio López, que compartimos con todos aquellos que, desde el primer día, luchamos para exigir su aparición”.





Presentación Tantas Voces... Tantas Vidas - 5 años de la desaparición de Jorge Julio López
Cinco años de la desaparición de Jorge Julio López

El mes de septiembre, desde hace ya cinco años, está atravesado por el nombre de Jorge Julio López.

Resistiendo al olvido y a la desmemoria interesada, desde la Asociación de Ex Detenidos- Desaparecidos (AEDD), desde el mismo lugar del compromiso, seguimos enfrentando la impunidad, exigiendo en cada hecho y en cada acto por Jorge Julio López.

La causa que investiga el secuestro y desaparición de López se encuentraparalizada desde hace al menos 2 años, y cada tanto rebrota con algún montaje mediático y con continuas irregularidades que llegan al mismo resultado negativo.

Cinco años ya de complicidades políticas que refuerzan la impunidad de la que gozan los responsables de las desapariciones de Jorge Julio López (1976 y 2006). Cinco años ya que exigimos rigurosidad en las numerosas líneas de investigación que existen desde el inicio de la causa y se castigue a todos los responsables, sean autores intelectuales, materiales o cómplices, del secuestro y desaparición forzada de Jorge Julio López.

Frente a la hipocresía de algunos y al silencio de muchos, este nuevo número de la revista que editamos, Tantas Voces... Tantas Vidas es una suerte de abrazo ineludible con Jorge Julio López, que compartimos con todos aquellos que, desde el primer día, luchamos para exigir su aparición.

Un abrazo colectivo lanzado en palabras con las que transitamos en diferentes notas y artículos:
-  Historia de vida. Un recorrido por la vida de Jorge, como lo llamábamos por entonces, conversaciones, testimonios judiciales, nuestra reconstrucción.
-  Una condena histórica: "Como a los nazis, les va a pasar, a donde vayan los iremos a buscar"
-  Un pueblo testigo. Sin testigo no hay justicia.
y muchas más.
5 años sin López.
5 años sin culpables ni responsables.
5 años de silencio oficial.
5 años de impunidad y encubrimiento.
5 años de lucha.
Exigimos al Gobierno Aparición con Vida Ya

Presentación en Capital Federal:
-  Martes 13 de septiembre - 19 hs
-  Federación de Asociaciones Gallegas
-  Chacabuco 955

Presentación en La Plata
-  Viernes 16 de septiembre - 19 hs
-  Fac. de Bellas Artes UNLP - Sede “Pichila” Fonseca.
-  Calle 62 y Diag. 78. Aula 8 (Auditorio)



Elecciones primarias, la Biblia junto al calefón


PCT

Han pasado las Primarias en nuestro país, y en términos de las frías cifras, se dio el triunfo que todo el mundo pronosticaba del oficialismo, pero por un margen mayor al esperado. La oposición del sistema, dividida en pedazos, no pudo hacerle ni cosquillas a la presidenta.


Nadie puede negar la importancia de obtener 10 millones de votos, y mucho menos después de 8 años de gobierno, pero el manejo de las cifras al que nos tiene acostumbrados el sistema “democrático” dominado por los capitalistas, y particularmente el kirchnerismo (el Indec es un buen ejemplo de ello), quiere hacer ver una realidad que no es tal: dicen tener el 50% de apoyo de la población, cuando lo cierto es que obtuvo el 36% del padrón electoral. ¿Por qué? Porque ellos cuentan los porcentajes a partir de los votos “positivos”, en vez de hacerlo desde la totalidad del Padrón. La realidad indica:

Escrutadas el 96. 84 de las mesas

Padrón: 28.853.153 personas

Votantes: 21.757.053

Abstención: 7.096.100

Blancos y nulos: 1.034.882

Candidata/o Votos Porcentaje

Cristina 10.363.319 35,91

Abst., blancos y nulos 8.108.474 28,1

Entonces, lo correcto es decir que el gobierno tiene una aprobación del 36% de la población, y no un 50%.

Más allá del manejo de las cifras, no se puede desconocer el hecho de la enorme distancia que existe entre la capacidad de liderazgo del oficialismo y la de la desdibujada oposición. El kirchnerismo ha sabido presentarse como “lo nuevo” y popular, ante figurones que no resisten el más tibio análisis, como Duhalde, Rodríguez Saa, Alfonsín y la desbarrancada Lilita. Con este panorama, octubre será sólo un trámite para la administración pingüina. Sin embargo, no nos podemos quedar en la simple enunciación de los votos, porque lo que corresponde a todo estudio es la seriedad del abordaje de los hechos en su contexto.

Lo primero que debe señalarse es que ningún triunfo electoral, por más cantidad abrumadora de votos que se obtenga, es prueba de razón, de justicia, de defensa de los derechos de las mayorías ni de los intereses “nacionales y populares”, aunque así se lo declame y lo crean esas mayorías: si fuese así, entonces podrían esgrimir ese argumento los Tatcher, Reagan, Berlusconi, Aznar, Bush (padre e hijo) y hasta el Turco innombrable, todos elegidos y reelegidos por la “voluntad popular” en sus respectivas sociedades. No debemos olvidar el contexto en el que nos movemos, que es el de la cultura impuesta por el sistema capitalista. La conciencia popular queda entonces reflejada en ella, y generalmente, salvo tibios avances, en estos procesos los condenados suelen apoyar (y votar) a sus verdugos.

Decimos esto porque por más mascarada que proyecte el gobierno, lo concreto es que se sigue pagando una Deuda ilegal, ilegítima y fraudulenta (reconocido por el propio oficialismo, el 2% del PBI está destinado a tal fin, unos $21.000 millones); el petróleo, el gas y los recursos naturales, estratégicos y no renovables siguen estando en manos del capital multinacional, lo que posibilita un saqueo monumental como nunca se ha visto en el país; se siguen subsidiando a las empresas privadas con recursos del Anses, como por ejemplo ¡la General Motors!; las privatizadas de servicios también reciben subsidios del mismo origen.

El gobierno dice tener un proyecto de país “soberano”, pero uno puede elegir soberanamente ser dependiente, y eso es lo que hace el kirchnerismo. Por eso no deja de negociar con los buitres del sistema financiero globalizado; por eso genera leyes en favor de los grandes capitales en detrimento de los intereses populares, para que lleguen al país con sus inversiones que generarán utilidades (ganancias) como en ninguna otra parte del mundo, las que se llevarán a sus países de origen. Baste señalar por ejemplo, el sector minero, cuyas ganancias superan varias veces lo invertido, mientras nos vacía de recursos que no se renovarán y nos deja un desastre ecológico y humano del que no se tiene aún real consciencia. O, debido al saqueo de nuestras reservas, el precontrato firmado con Qatar, para importar gas durante 20 años (a partir del 2014), acuerdo que le costará al país la friolera de al menos ¡¡50 mil millones de dólares!! Cuánto podría explorarse y desarrollarse con esa inversión aquí mismo, sin requerir de recursos extranjeros. Nuestro pretróleo también se está acabando, ya que Repsol lo ha exportado y aún lo sigue haciendo sin explorar nuevos yacimientos, por lo cual en poco tiempo deberemos importar ese recurso. La Argentina autoabastecida será sólo un recuerdo.

Todas esas políticas tienen consecuencias sociales que provocan injusticias, despojo y dolor de los sectores más humildes. Más allá de los planes sociales, que son sólo parches, dádivas, asistencialismo, el kirchnerismo, después de ocho años de administrar el Estado, no ha podido resolver el déficit de vivienda digna para millones de seres humanos, y el problema le estalla por todos lados, para el cual sólo mostró reflejos represivos: así fue en el Indoamericano, con los pueblos originarios (por ejemplo, los Qom en la oficialista Formosa), o en Jujuy.

La inflación es una realidad incontrastable que hace cada vez más vergonzosa e indignante la intervención al Indec. Nadie se come el “0,...” de aumento mensual de los precios al consumidor, cuando, por ejemplo, solamente los combustibles acumulan un 25% en lo que va del año y varios productos de la canasta alimenticia están por encima de ello. Según el propio “indeK”, el 70% de los asalariados gana $2900 en promedio, cuando la canasta familiar es de alrededor $5500, y el 35% de los trabajadores están en negro. Además, en promedio, el 32% del salario es no remunerativo, siendo el Estado el que más “negrea” los pagos a sus empleados. La jubilación está en $1230 y pasará a $1430, quedando lejos aún de la canasta familiar.

Con estos números, el gobierno considera aún la línea de pobreza en $1700 (por lo que alguien que gana $1701 no es considerado pobre, aún ganado $3800 por debajo de la canasta familiar), y de indigencia en $771,72 (no considerándose indigente a quien obtenga $771,80 mensuales). Estos números también indignan: ¿cuántos pobres e indigentes más indicarían, si se tomara como medida la ya mencionada canasta familiar?: los que hay en realidad.

Sin embargo, el pueblo ha votado todas estas inequidades, ocultas detrás de las urgencias, traducidas en el trabajo conseguido y la posibilidad de llevar un trozo de pan ganado dignamente a la mesa familiar. Pero detrás del discurso “popular” del gobierno, detrás del dedo apuntado a los “monopolios” representados en el Grupo Clarín, como si éste fuera el único enemigo de las mayorías asalariadas, hay una administración que responde a los intereses de Repsol, la Barrik Gold, Grobocopatel, Ledesma (con los Blaquier, cómplices de la dictadura), SanCor, Urquía y las grandes empresas oligopólicas que obtienen ganancias siderales gracias a la política “nac y pop”. El cambio en el voto en el “campo” y en los sectores ricos del país así lo atestiguan.

Para asegurar todas esas políticas de entrega y saqueo, persiste en la persecución de todo aquél que se oponga, con la Ley “Antiterrorista” de Bush como bandera. La reapertura del juicio al compañero Martino y otros compañeros de las FAR por presión de la sionista Daia, el mantenimiento en prisión de los compañeros Olivera, la Galle, José Acosta, Víctor Oñate, obreros de Santa Cruz y la lista sigue, además de los miles de procesados, son claro ejemplo de ello

En ese marco, la izquierda y la centroizquierda también han cumplido su papel. Proyecto Sur ha desaparecido detrás de una paliza impensada en las urnas, debido, en gran parte, al sectarismo y la soberbia que durante décadas se le han achacado a la izquierda tradicional. Ésta, en su versión electoral, el FIT, ha logrado superar el piso proscriptivo después de una curiosa campaña de propaganda donde el centro era “pedir el voto” sin ninguna enunciación programática. Nosotros nos hemos pronunciado acerca de la conformación de ese frente, criticando su formulación desde posturas autoproclamatorias y sectarias. Sin embargo, si este armado confirma su performance en octubre, será un referente ineludible dentro del movimiento revolucionario del país.

Lo concreto es que más allá de los procesos electorales en curso, está a la vista que los grandes problemas del pueblo argentino están aún lejos de solucionarse, y que la estructuración del país que lleva a cabo el gobierno no va en ese sentido, sino todo lo contrario: nos van a dejar un Estado vaciado de recursos, dependiente de la importación, las inversiones y el financiamiento externo, con amplias zonas contaminadas y desertificadas.

La salida, como siempre lo decimos, no está dentro de los límites del sistema capitalista que fomenta todos esos desatinos. El mundo es testigo de la descomposición a que nos está llevando una humanidad dirigida por los patrones. Ya no sólo se ven sus efectos degradantes en los países periféricos y subdesarrollados, sino en las metrópolis: se incendia Londres y varias ciudades de Inglaterra, Europa es un polvorín y EEUU no puede sostener una economía que se desbarranca, arrastrando al resto del mundo a una conflictividad sin precedentes. Pero para poder soñar con una sociedad justa, liberada y soberana, tendremos que extremar la inteligencia, la militancia y la humildad los que decimos luchar todos los días por ese objetivo. 


Informativo Latinoamericano Púlsar 12/09/2011

Molina y Baldizón disputarán la segunda vuelta en Guatemala. Solidaridad de familiares de víctimas del 11S en Estados Unidos con el pueblo afgano. Conmemoran en Chile golpe militar de 1973.





La educación como herramienta de liberación

DIEGO TEJERINA, PRESO EN LA UNIDAD Nº 48 DE SAN MARTÍN

(AW) Diego Gabriel Tejerina está privado de su libertad desde hace 11 años. Es el coordinador del taller de periodismo de la unidad Nº 48 de San Martín y es alfabetizador en un lugar donde el analfabetismo y el analfabetismo funcional son muy altos. En esta entrevista nos habla del estigma de ser "negro" y pobre, de por qué salió "de caño" y de cómo se convirtió en educador.-

"Prisión" de Van Gogh



San Martín, 8 de setiembre de 2011.-
Por Rodolfo Grinberg

Quizás se asuste si se cruza con Diego Gabriel Tejerina en la calle. Si es consumidor habitual de "TN"; "Crónica"; o de cualquiera otra expresión de la prensa bastarda. Si invierte buena parte de sus ingresos en alarmas, rejas y candados porque en la calle "pasan cosas". Si pasa más tiempo en casa mirando el noticiero que afuera, donde late peligrosamente la vida. Si piensa que el mundo es injusto, no porque hay muchos y muchas que no tienen nada; nada para gastar ni dónde poner un candado, sino porque no se invierte el dinero público, el de los impuestos que paga la "gente decente", en hacer más cárceles y poner más policías para que los ciudadanos no tengan tanto miedo. Diego Tejerina porta rostro. Es culpable de rostro. Y quizás se asuste si se lo cruza.

Pero no se preocupe, para su alivio hace 11 años que Diego está preso. Él está condenado. Está condenado desde mucho antes de nacer. Está condenado por el miedo y el odio colectivo. Por quienes se cruzan de vereda y exigen "mano dura". Tal vez, dentro de un tiempo Diego pueda volver a la calle. Pero difícilmente pueda librarse del estigma y la condena.

Entrevistamos a Tejerina en la unidad Nº 48 de San Martín, en el marco del taller de periodismo que dictan La agencia de Comunicación Rodolfo Walsh y el equipo de educación popular Pañuelos en Rebeldía. Diego es coordinador del taller. Él cursa el segundo año de sociología en la sede que posee la Universidad de San Martín en el penal y además es alfabetizador. Ayuda a sus compañeros que no saben leer y escribir. 

Hoy la educación es la pasión de Diego Tejerina. Sueña salir de la cárcel y ayudar a las suyos, a los más pobres, a partir de la enseñanza. 

Su vínculo con la educación comenzó en el CPU, el curso de ingreso a la universidad. "Teníamos que rendir matemática y soy muy bueno", explica Diego mientras hace la pausa para dejar que una amplia sonrisa cargada de orgullo inunde su cara. "Soy bueno porque me acuerdo mucho de lo que vi en la secundaria acá, dentro de la cárcel. Los pibes no recordaban mucho. Yo les explicaba en el pizarrón y ellos entendían muy rápido. Los chicos que estaban alfabetizando me vieron explicando y me dijeron "¿No querés alfabetizar?" "bueno dije." Y me encontré con algo desconocido".

Diego nació en Buenos Aires hace 31 años. Hijo de Roque, un jujeño que hace 35 años que sobrevive tapizando automóviles, y de María, chaqueña, ama de casa y mamá de Roxana y Yanina, las hermanas menores de Diego. "Son muy humildes. Son como se dice acá: dos paisanitos ", dice Diego cuando habla de sus padres. Sin duda en sus venas corre sangre de los milenarios dueños de esta tierra. Diego lleva en su sangre y en su piel la dura y curtida dignidad originaria.

"Estoy muy orgulloso de mi padre." afirma Diego, "tengo la educación y el respeto que ha enseñado él. Tenemos un pensamiento común que es que la familia es el núcleo fundamental de donde sale toda la cultura y la educación de uno. Ellos lucharon mucho desde chiquititos mientras trabajaban. Son de fierro. Por eso los amo. Estoy muy orgulloso de ser su hijo."

Ser Villero

Diego se crió en una villa de Vicente López. Localidad en la que como en pocas se percibe el terrible contraste entre los que nada tienen y los que ostentan lujo y banalidad. Con sacrificio los padres decidieron mandarlo a lo que ellos consideraban una buena escuela "Me mandaron al mejor colegio de Olivos, en Vicente López, la escuela Nº 1. Era del estado pero iban todos de clase media. Ahí hice la primaria y la secundaria la terminé estando preso.", recuerda, pero para poder entrar a la escuela de Olivos tuvo que dar la dirección del trabajo del padre, frente a la quinta presidencial de Olivos. Tenía que ocultar su condición de pobre y de villero. 

"Desde ahí empecé a sentir exclusión: por ser negro, por no hablar como ellos.", cada palabra se desliza pesadamente de la boca de Diego, cae y golpea la conciencia como martillo sobre un yunque, "Me daba cuenta de que no podía invitarlos a mi casa porque no podía invitarlos a una villa. Yo iba a la casa de ellos e iba a una mansión. Estaba la computadora, pileta. Dentro mío me sentía mal porque mi papá trabajaba todos los días y no teníamos eso y no podíamos salir de la villa." La única forma que el pequeño Dieguito encontró de sentir en ese ambiente que se le tenía un poco de respeto fue a "las piñas".

- Te voy a contar una anécdota. - Dice Diego para ejemplificar su sentimiento.

"Yanina dejó el colegio. Ella tenía una manera de hablar y de expresarse y el profesor tenía otra. No había comunicación. Él no se daba cuenta que mi hermana tenía una problemática grande por el lugar en que nosotros nos encontrábamos viviendo: en una villa. Ella dejó el colegio, porque no le gustaba, porque no la entendían, no entendía lo que le decían. Tuvo un hijo después y la desgracia de que mi cuñado se ahorcara un día antes de que nazca mi sobrino. "
Ahora Yanina, la hermana más chica de Diego está estudiando criminología en la provincia de Jujuy. La otra hermana Roxana terminó la universidad y se recibió de despachante de aduana. 

La secundaria intentó hacerla en el Paula Albarracín, un colegio de clase media de Vicente López, pero no pudo aprobar el ingreso. Fue entonces al Comercial Nº 5 de Munro. "Era nocturno de adultos. Yo era el más chico, tenía 14 años y los más chicos de ellos tenían 29. Con toda esa gente yo era un pibito y estaban afuera tomando gancia, fumando un cigarrillo o un porro. Me crié entre todo eso, más allá de que en la villa eso estaba. Imaginate que de la villa salí para ir a Munro y me encontré con algo parecido, pero no tan a full como es una villa. Lo malo de eso es cómo me sentía excluido. Me trataban diferente. Ahí también me gané el respeto a las trompadas, a las piñas."

Sin duda la violencia fue la única respuesta que el adolescente Diego pudo articular ante la inconmensurable violencia ejercida desde un estado que decidió que una gran parte de la sociedad debe vivir en condiciones indignas, la violencia de un sistema social basado en la injusticia. 

"Eso lo tomo como ejemplo," explica Diego, "no quiero que sucedan esas cosas en el lugar donde vivo, en la villa. Hemos pasado muchas cosas. Sufrimos mucho. Me gustaría enseñar a los chicos de la secundaria, a los adultos, para hacerles ver. Como yo ya he cursado todo el circuito... veo a los pibes que le dicen al profesor: "vos no entendés lo que me pasa a mí porque no lo pasaste. Lo tuyo es sólo teórico, libros y nada más. . ¡Viví entre nuestra clase!". Esas cosas salieron de mi boca cuando era más chico. Yo quisiera estar en frente de ellos y que vean que yo también fui como ellos."

Piensa en sus padres y agrega: "Quiero recibirme para darles esa satisfacción a ellos y sientan orgullo de mí. La sociedad a veces no te da oportunidades, pero creo que uno mismo debe buscar esa oportunidad para mostrarle a la sociedad que está equivocada."

Salir de caño

"Te voy a contar algo..." Diego hace la pausa, su mirada se torna vidriosa y sus dedos inquietos frotan sus manos, como si buscasen en ellas las palabras justas, medidas; las palabras que del fondo de la memoria puedan recuperar el sentido de las acciones. "Te lo voy a decir" expresa finalmente "Ver a mis viejos luchando. Todas las noches vomitando que querían irse de la villa. Cuando hacías 4 cuadras y enfrente, una mujer con un Mercedes Benz llena de oro. Relojes Cartier, relojes President. ¿Cómo podía ser que ellos tenían mucha plata y en la vereda de enfrente mi viejo... no teníamos nada y se rompía el orto laburando para poder progresar y darnos lo mejor a nosotros? ", Diego me interroga con su mirada y a través de mí al mundo.

"Y apropié y bueno..." continúa el relato desgarrado "agarré una pistola. Sí agarré una pistola y me sentí identificado. Yo quería que mis viejos salgan. No sabía cómo ayudarlos para que mis viejos tengan su casa. Ya tenía 14, 15 años y veía que ellos luchaban a full y no podían salir. Mucha impotencia me daba porque los quería ayudar y no sabía cómo. Y así empecé... de a poquito... de a poquito... y bueno... después empecé a salir de caño y... después..."

Después vino la cárcel, el lugar donde el sistema deposita a la gente para olvidarla. 

"Yo estuve preso anteriormente y me fui absuelto las dos veces. ", confía Diego "Ahora estoy condenado con muchos años y hasta el día de hoy estoy procesado. Llevo 10 años y once meses y no sé nada de mi causa, hace 8 años y medio que está en casación." Y agrega "La causa que tengo ahora... y no digo que no, porque delinquí muchos años... pero la cosa... te digo que no tengo nada que ver porque me acusaron por fulano de tal. ¿Entendés? "

Y aunque por experiencia, no cree en el sistema judicial, Diego no pierde la confianza "Creo que la justicia es a veces un poquito sucia. Pero igual creo que esto se va a revertir, porque si uno no tuvo nada que ver, por más que yo me haya comido todo esto creo que... la vida me va a dar una oportunidad. "

La Cárcel

"No le deseo a nadie vivir acá, ni al peor enemigo. Esto es una tumba. Un depósito de personas a las que no se les cumplen ninguno de sus derechos. ", es lo primero que dice Diego cuando se le pregunta sobre la cárcel. 

Muy lejos de sus propósitos declarados de resocialización para quienes jamás tuvieron un lugar de mínima dignidad dentro de la estructura social del capitalismo, la cárcel funciona como un gran disciplinador de la sociedad. Es el lugar por excelencia, no el único, donde se mansilla la dignidad humana, donde la tortura se extiende en el tiempo más allá del cumplimiento del tiempo de condena y más allá de la persona física del condenado. La tortura se extiende a todo el entorno de la víctima. Además la cárcel forma parte del gran negocio de la pobreza. No vale la pena seguir, esta agencia se ha ocupado extensamente sobre el tema.

"Gritás a full y no te escucha nadie. Hablamos en otros idiomas, por eso no nos escuchan." Agrega Diego.
Pasó por una multitud de penales y puede hablar por haberlos sufrido en la propia piel. Diego estuvo en Olmos, en Mercedes, en la unidad Nº 23 de Varela, en la 42, en San Nicolás, en Sierra Chica, en Alvear, en Bahía Blanca, hasta que llegó a la unidad Nº 47 de San Martín en el 2009. Y hace dos años que está acá en la 48 donde accedió a la universidad. Los continuos traslados también son parte de una metodología destinada a romper los vínculos y destruir la entidad humana. Diego lo vivió: "Yo sufrí mucho. Perdí a mi familia. A mis hijos. Ahora la recuperé, pero acá adentro perdés tu familia. Tengo 3 hijos hermosos. "

Diego nos explica que aunque todas las cárceles se parecen y se padecen "son distintas por el contexto". Las cárceles más viejas como Olmos o Sierra Chica, que vienen del siglo XIX, tienen regímenes más pesados. Ahí ves el sufrimiento en carne propia. No podés salir, estás engomado las 24 horas" En cambio en las más nuevas como esta "se sufre también, pero hay un poquitito más de libertad, como la universidad". 

Tanto la universidad, como los talleres y otros derechos que con mucha dificultad pueden ejercer presos y presas son fruto de largas luchas de los propios afectados y de esa parte de la sociedad que es solidaria con los más oprimidos. Recientemente se aprobó una nueva ley de educación en contexto de encierro que permite reducir las penas a quienes estudien, entre otras cosas. Sin embargo los servicios penitenciarios suelen hacer caso omiso de este, como de muchos otros derechos y hacen lo posible para que los presos y presas no puedan estudiar y mantenerlos bajo su sometimiento.

Suicidios.

El último informe del Comité contra la Tortura da cuenta de que en el último año se constataron 15 muertes por suicidio en el último año en los penales bonaerenses, y la cifra va en aumento.

A Diego Tejerina le cuesta hablar del tema "Acá la gente a veces llega a pensar... la opresión se siente tanto en una celda aislado y solo... pero el comprometerte con lo que pasa afuera, del otro lado de los muros, con tus seres queridos. Los sentimientos..." hace una pausa, mira el piso, busca palabras para explicar los sentimientos que oprimen el pecho "...te agobian tanto que te cierran la mente, que te parece que no tenés salida, que tenés que irte de este lugar y la manera, la solución es irte de la vida, suicidarte." Recientemente se quitó la vida un compañero que asistía al taller de periodismo: Walter. "Eso es algo que pasa mucho acá adentro." Explica "yo vi mucha gente que se ahorcó por la depresión fuerte que hay". 

Nadie sale indemne de la prisión, "porque para estar en este lugar tenés que ser fuerte de mente. Pero eso lleva un largo, largo proceso.", reflexiona el coordinador del taller de periodismo. "Una manera que encontré yo cuando estoy mal es escribir. Cuando estoy mal escribo. Recién escribí cómo revertir recaídas estando en situaciones oscuras. Trató de mantenerme en un foco. Mi foco es mi libertad, mi crecimiento. Creo que atrás de eso voy a poder ayudar a los demás. Primero es la ayuda mí mismo. Si no no puedo ayudar a nadie. Me doy fuerzas para seguir adelante, cuando aparecen las trabas y decaigo me pongo nuevamente, sacó fuerzas de donde no tengo, pienso en mi libertad y en mis hijos. Sé que puedo y confío en mi capacidad para poder revertir esa recaída y esa angustia que tengo dentro mío. Y me funciona" aclara.

Presente y futuro

Diego sueña con poder transmitir parte de lo aprendido en estos duros años a sus hermanos y hermanas de clase, "es algo que me gusta mucho. Espero tener la suerte de poder enseñarle a los chicos y también a adultos cuando pueda recuperar mi libertad". Aún le faltan cuatro años para poder gozar del beneficio de las salidas transitorias, pero Diego no desespera y es optimista. "Creo que la educación es la herramienta para que nos puedan escuchar y vean que tenemos necesidades y que algunos queremos cambiar. Hemos hecho cosas malas, las estamos pagando en vida propia" advierte y se entusiasma "en la educación aprendí mucho, conocí un nuevo mundo que no conocía antes. ¡Me encanta lo que hago! ¡Me fascina, me hace sentir bien! ¡Hago lo que me gusta! Poder enseñar a un par mío: ¡Qué puedan escribir una carta! ¡Qué puedan leer su causa! Es lo mejor para cada uno ¡Amo la educación! Y espero poder seguir fomentándola."

Y aunque piensa en el día de su salida a la calle, que aun está lejano, no desespera, "más allá de la imaginación trato prepararme día a día para estar en ese momento Creo que van a ir las cosas bien porque tengo un foco muy fuerte y nadie me lo va a sacar del medio".

Quizás se asuste si se cruza con Diego Gabriel Tejerina en la calle, pero no sabe lo que se pierde.