lunes, 16 de mayo de 2011

Pague primero, esa es la cuestión

(...)Así como en educación de la mano del Banco Mundial edificaron la teoría y práctica de las escuelas Express, en salud irrumpieron con las pre-pagas, en su concepción de seguro de salud, conceptualmente ajeno a lo sanitario y propio del financiamiento, para finalmente después del decreto 446/00 de desregulación, avanzar como inundación sigilosa y nocturna. Como la mancha voraz, en el sistema social solidario de salud de las obras sociales, produciendo un efecto devastador de implosión, que pasaré a explicitar.


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Por Jorge Rachid, médico

Un sistema solidario se basa en un equilibrio dado por la mecánica etaria, por edades y situaciones, de toda sociedad, es decir desde los jóvenes a los viejos, desde los sanos a los enfermos y quienes más ganan y menos ganan, aportan a un sistema que brinda excelencia y complejidades terapéuticas en la medida que los aportes de los más solventan, los gastos de los menos. Así funciona la solidaridad activa, en la Argentina y en el mundo, desde la salud a las cajas previsionales, desde la escuela pública al Estado, todos aportamos al llamado "bien común".

Cuando en los 90 el Banco Mundial, con la coerción de los créditos, en realidad endeudamiento externo, avanza sobre los sistemas solidarios no lo guía ese bien común sino los recursos de los ahorros genuinos de millones de argentinos que pretenden apropiar y manejar. Así proponen y logran las AFJP, privatización de la seguridad social en un concepto individualista y egoísta que constituye el principal saqueo neoliberal de 90 mil millones de dólares en 14 años. Avanza sobre los trabajadores en sus condiciones de higiene y seguridad coaptando el 3% de la masa salarial total y además las prepagas se preparan para manejar 25 mil millones de pesos al año, del ahorro de los trabajadores tendiendo por lobby, a un seguro de salud universal bancario, descremando el sistema solidario de salud, apropiándose de 2,5 millones de trabajadores de altos salarios, en su mayoría jóvenes y sanos.

Este sistema prepago de salud no tenía ninguna regulación, dependía de la ¡Secretaría de Comercio!, toda una definición. No tiene protocolizado sus sistemas de prestaciones, elude el Programa Médico Obligatorio de la Superintendencia de Servicios de Salud, salvo expresa orden judicial. Discrimina por edad, da de baja afiliados por patologías, no tiene salvo en sus prestadores, control de las autoridades de Salud Pública, elimina el riesgo empresario al camuflarse como Obra Social y recibir el aporte solidario del APE fondo constituído por los trabajadores activos con el 10% de su aporte para la salud. Eso se llama descreme: llevarse las joyas de la abuela y que el entierro lo paguen los parientes pobres, una constante de la historia reciente desde 1976.

(...) Si se publicase mensualmente la cantidad de cirugías de alta complejidad asistidas por las obras sociales, la lista de discapacitados atendidos por las mismas desde chicos, las de enfermos crónicos, de las prótesis y medicamentos de alto costo y baja incidencia y el gasto por mes soportado por el sistema solidario, nadie dudaría de su eficacia. Si les hiciesen reportajes a los pacientes derivados a centros de alta complejidad incluso al exterior otra sería la percepción. Ningún medio lo publica, debemos sospechar que por algo será, sponsoreo quizás.

Los trabajadores argentinos han constituido un sistema único en el mundo que permite atender sus propias contingencias, prevenir su salud y encima financiar en forma inter-gerencional las prestaciones de nuestros mayores con un aporte solidario del 3% de la masa salarial total. Tomar en cuenta que es lo mismo que recaudan las ART para rechazar en forma sistemática las patologías siniestrales derivadas del trabajo que ocasiona tres muertos diarios y 700 mil accidentes al año, muchos atendidos por las obras sociales, de poca crónica en los medios. No existe otra prestación similar en el mundo, siendo conocido por los médicos y aquí ocultado que en los principales países del primer mundo la salud que existe es sólo pública, sin participación del capital privado, que se financia con fondos públicos no con descuentos obligatorios a los trabajadores, es decir con impuestos tributarios.

No son las empresas de medicina prepagas quienes están en riesgo, son las obras sociales de trabajadores que han sido diezmadas por el carancheo lucrativo del capitalismo. Debo decir también que a partir del decreto 446/00 de desregulación se canibalizó el sistema entre las mismas obras sociales, lo cual trajo aparejado hechos de corrupción en algunas que deben ser combatidos con la justicia en la mano, como cualquier argentino debe responder ante ella.

Asimismo debe el Estado nacional hacerse cargo de su responsabilidad primaria en la salud de la población ya que se trata de un derecho humano esencial y un derecho constitucional por lo que tanto en los temas de leyes como la discapacidad, las enfermedades huérfanas, la prevención, la producción pública de medicamentos, la compra centralizada de los medicamentos de alto costo y baja incidencia, como la protocolización de prótesis y la sustitución de importaciones en ese rubro, son temas pendientes.

Derogar el 446/00 es establecer de nuevo el equilibrio solidario, no hacerlo es profundizar la crisis del sector de atención a la enfermedad.

No ignoro lo que se ha avanzado en materia de salud a través de la obra pública con agua corriente y cloacas, verdadero pilar de un plan de salud según el Maestro Carrillo.

Tampoco ignoro que la Asignación Universal por Hijo en sus precisiones de vacunación y escolaridad ha mejorado situaciones límites además de permitir una alimentación completa a la familia argentina. Tampoco ignoro que las vacunas del nuevo esquema pueden y deben ser elaboradas en nuestro país, por los laboratorios públicos con investigadores y profesionales comprometidos y heroicos, no reconocidos, que silenciosamente avanzan en las enfermedades huérfanas y endémicas nuestras como el Mal de los Rastrojos y el Chagas, antes que ser parte de convenios con multinacionales con otras prioridades sanitarias, lucrativas y muchas veces operaciones mediáticas en salud a través de la OMS como la gripe A verdadero escándalo internacional.

(...) Las Mutuales y Cooperativas del país están fuera de esta crítica ya que las genera una iniciativa solidaria destinada al bien común, como las obras sociales sindicales, el PAMI y los Institutos Sociales de las provincias argentinas, todos organismos que han pretendido ser "gerenciados" por estos sistemas financieros liderados por el Banco Mundial, que lo sigue intentando ahora con crédito de 600 millones para salud, y que en algunos casos lo han conseguido con resultados lamentables desde lo sanitario denigrando prestaciones y desde lo institucional vaciando sus recursos, impidiendo asimismo un verdadero plan nacional de salud que cambie el paradigma de la atención de la enfermedad por la defensa de salud.

Qom: La diferencia entre “apurarlos” y ser solidario

Un pequeño relato donde se intenta traer luz a sucesos recientes que involucran a los Qom de La Primavera y a miembros de La Cámpora.Por Gabriel Levinas



Durante días se ha discutido acerca de la conducta de La Cámpora en el acampe de la 9 de julio. Inclusive se llegó a ofender desde las altas esferas del gobierno a Nora Cortiñas, una mujer de honestidad absoluta y defensora incondicional de los Derechos Humanos en la Argentina.

Paso a relatar algunos hechos y conversaciones que, tal vez, pongan algo de claridad sobre esto.

No muchos están dispuestos a escuchar nada que les arruine su visión sobre las cosas y alegarán ocultas razones para justificar el origen de mis dichos. Otros podrán sacar conclusiones que les ayudarán a entender un poco más no solo este hecho sino tambien parte de lo que está pasando con esta perseverante lucha por sus vidas y dignidad que están llevando adelante Félix Díaz y el resto de los miembros de la comunidad Qom de La Primavera.

Cuando se me preguntó insistentemente quién mentía, Nora o los Qom, contesté una y otra vez que Nora decía la verdad y que Félix estaba usando la cautela para no arruinar la posibilidad de la reunión prometida para el lunes pasado (9 de mayo).

Casi dos semanas atrás, de manera alterada y agresiva, Andrés Larroque discutió en el acampe con Félix Díaz haciendo, de manera constante, ostentación del poder que, según él tenía, tanto para resolver como para hacerle pagar las consecuencias a Félix si no levantaban el acampe. A cambio estaban solo sus promesas de solución.

Naturalmente, Félix con su calma habitual, le pidió que lo ponga en línea con el ministro Fernández para saber si lo que le estaba diciendo tenía el respaldo del gobierno nacional. Larroque se negó. Por último, furioso porque Félix parecía no reconocer su poder, se retiró enojado y sin saludar.

Pocos días más tarde, en el mismo momento en que la Guardia de Infantería se disponía a reprimir el corte por orden de una fiscal de la Ciudad, en respuesta a una denuncia proveniente del Ministerio de Seguridad de la Nación, intervine personalmente y me reuní con Larroque en el bar de Hipólito Irigoyen y Bernardo de Irigoyen. Antes le avisé al comisario a cargo del operativo -quien estaba ya dispuesto a proceder con el desalojo- que iba a la reunión con un subsecretario de la Jefatura de Gabinete y que por favor esperara el resultado de la misma antes de actuar, pedido al que accedió.

Mientras tanto, Félix trataba de decidir con los miembros de la comunidad si se levantaba el corte temporariamente.

A partir de allí tuve varias conversaciones en la que se notaba claramente la presión, el apuro y el desconocimiento del arte de la negociación de Larroque y sus colaboradores, con quienes debo haber hablado durante dos días cerca de diez veces telefónicamente . Todas las llamadas de Larroque o sus colaboradores se hicieron desde el mismo celular.

Querían que se levantara el acampe inmediatamente a cambio de promesas y se enfurecían cuando se les respondía que eso no iba hacerse hasta no ver señales concretas y contundentes que demostraran una solución, por parte del gobierno, a alguno de los problemas que sufría la comunidad. El diálogo de sordos, en el que los objetivos de ambas partes eran tan distintos, no podía terminar en buen puerto.

El objetivo de los Qom, que lamentablemente no pude transmitir con suficiente claridad, era que el Estado cumpliera con su función de garantizar el acceso al agua, a la salud, la seguridad y la obtención de los DNI. Larroque quería negociar esos derechos a cambio del levantamiento previo del acampe.

Esta sola situación es, por demás, clara. El Estado Nacional -por boca de un subsecretario- negocia lo que no puede ni debe ser negociado: los derechos inalienables, indiscutibles de cualquier ciudadano: “Te doy los documentos, salud , agua y te cuido para que no te sigan matando si levantas las carpas de la 9 de julio, sino le digo a la Policía Federal que te desaloje y olvidate de nosotros” dice el Estado.

Por supuesto la negociación se hizo imposible. Mi preocupación era la penosa situación de 850 familias en Formosa, abandonadas a su suerte y la preocupación de Larroque era sacar a los indios de la 9 de julio.

Después vino finalmente la reunión en el Ministerio en la que Félix Díaz se comprometió únicamente a consultar con su gente si levantaban el acampe, cosa que decidieron hacer recién después de tener la reunión del lunes 9.

La noche anterior al desalojo, Félix recibió una llamada telefónica fuertemente amenazante de Larroque en la que le aseguró que si no levantaban el campamento no iba a haber reunión el lunes. Al recibir la llamada Félix cambió de cara, se le llenaron de lágrimas los ojos y se encerró en su carpa.

A la mañana siguiente, me llamaron Félix Díaz y Pablo Asijak para informarme que había llegado la Gendarmería con la orden del Ministerio de Seguridad de levantar el campamento inmediatamente y que le habían cortado el teléfono que le proveía el INADI.

Cabe acotar que el jueves anterior al sábado en que se levantó el campamento, el Coronel Mayor Zaracho -a quien le fuera encomendado, por el Ministerio de Seguridad, el traslado de los Qom a la Primavera- se acercó para evaluar el traslado acordado y en voz alta dijo que para hacer las cosas como corresponde, desarmar el acampe y ordenar las donaciones, se iba a necesitar hasta el lunes. Razones politicas desconocidas cambiaron esta evaluación por una apurada e inconclusa desaparición del campamento.

Volviendo al día sábado, el día de la partida. Poco después de la llegada de la Gendarmería un grupo de integrantes de La Cámpora se hizo presente en el lugar con la supuesta tarea de supervisar el levantamiento del campamento y la partida a Formosa de la mayoría de los Qom.

La decisión tomada en ese momento por los Qom fue no hacer ni decir nada que justificara lo que muchos querían; abortar la reunión del lunes. Y así fue que en silencio la mayoría rápidamente ayudo a levantar el campamento, meter las cosas en un pequeño camión y se fueron para La Primavera dejando una gran cantidad de paquetes que la ayuda solidaria de la gente de la ciudad les acercó voluntariamente.

Los miembros de La Cámpora, que jamás estuvieron durante los 5 meses del acampe,no les aportaron siquiera una botella de agua, estuvieron allí solamente para la salida de los Qom. En un momento se les pidió que abandonaran el campamento y se quedaron parados mirando desde la vereda de enfrente. Una posición simbólicamente más exacta .

Síntesis: llegaron con la Gendarmería y se fueron cuando la Gendarmería se fue. ¿Abrieron la boca? No, ¿le pegaron a alguno? Tampoco.
 
Las conclusiones las saca usted.

La deuda pública argentina sigue creciendo

Fabiana Arencibia (RED ECO)

El camino del “desendeudamiento” se torna difícil de explicar cuando los propios datos oficiales no lo demuestran. Y cuando además hay deuda que no está reflejada en esos datos. Deuda que son compromisos contraídos tanto con acreedores privados, externos o no, y también con los jubilados.

Que casi la mitad de la deuda pública del Estado nacional ahora sea con nosotros mismos (deuda intra-estado), podría ser visto con buenos ojos sino se conjugaran cuatro factores. El primero es que esa deuda deviene de deuda odiosa, ilegítima, de corruptos que han hecho negociados para beneficio propio y de sus amigotes, de golpistas y asesinos. El segundo es que los responsables, delincuentes de guante blanco, están en libertad a pesar de haber cometido delitos económicos. Que parte de la misma ha sido declarada ilegitima por la justicia y que hay causas abiertas por otras y que sin embargo esto no fue traba para que se siga pagando y/o renegociando. Y que a pesar de esto último, la gestión kirchnerista es la que más ha pagado deuda y quien ha dado los pasos necesarios para lavar la cara ilegítima de la misma para ponerle la máscara de legal.

Estas consideraciones políticas pueden, por otra parte, ser acompañadas por datos precisos que dan cuenta por qué el gobierno falta a la verdad cuando dice que nos estamos desendeudando.

Los últimos datos publicados por el Ministerio de Economía de la Nación (31/12/2010) respecto a la Deuda Pública del Estado Argentino dan cuenta de obligaciones que se acercan a los 176.000 millones de dólares.

Si no sumamos la deuda no presentada en los canjes (y acá repetimos lo que decíamos en nota anterior: esto no significa que NO se vaya a pagar) esta cifra baja a 164.000 millones de dólares. La deuda creció así en un trimestre (el informe anterior era de 30/9/10) casi 3.500 millones de dólares.

Según los datos del Ministerio, la composición de la deuda pública prácticamente no varió en esos tres meses. Para no marear al lector con cifras diremos entonces que el gobierno informa a través de Economía que la deuda del Estado consigo mismo (deuda intra-estado) representa casi el 47% del total. El resto se reparte entre el sector privado (38 %) y organismos de créditos internacionales (11%), y se completa con deudas atrasadas que se están renegociando con el Club de Paris (4%)

Queremos en esta nota reflexionar sobre el supuesto camino del “desendeudamiento” que el gobierno nacional sostiene enfáticamente como transitado desde que Néstor Kirchner canceló en diciembre de 2005 la deuda con el FMI.

En primer lugar, los propios números del Ministerio de Economía (Mecon) arriba mencionados muestran que la deuda creció. Esta tendencia se dio durante todo el 2010. Solo basta con mirar esos informes oficiales (147.000 millones de dólares a fines de 2009, 157.000 millones al 30/6/2010; 160.000 millones al 30/9/2010 y 164.000 a fines del año pasado).

Pero además no toda la deuda esta computada dentro de estas cifras. Hay una gran parte de endeudamiento público que se oculta. Es lo que Héctor Giuliano, un estudioso del tema que ha escrito varios trabajos y libros, llama la DEUDA NO REGISTRADA

Giuliano explica cuáles son los componentes de esta deuda oculta. Por un lado están los intereses que no se llegan a pagar. El presupuesto 2011 prevé cerca de 9.000 millones de dólares de intereses pero el gobierno NO informa cuánto de eso no se llega a pagar y por lo tanto se suma al capital adeudado generando así una deuda mayor y mayores intereses. El mecanismo de cobrar intereses sobre intereses es, lisa y llanamente, una usura (anatocismo).

Tampoco se computa como deuda el ajuste de la expresada en pesos que se hace con el CER (coeficiente que registra la variación del índice de precios al consumidor, o sea según la inflación). Además no se informan los pagos adicionales que se hacen a los nuevos tenedores de bonos en función del crecimiento del PBI (así se acordó en el canje 2005 que hizo Néstor Kirchner).

Esta Deuda no registrada ni informada, es parte de la Deuda Pública. Como lo son también las letras (LEBAC) y los bonos (NOBAC) que el Banco Central emite para que retornen los pesos que larga al mercado cuando compra dólares. El objetivo de esta compra de divisas es, por un lado, sostener la cotización del billete para que los sectores exportadores tengan un precio competitivo y por el otro obtener divisas con la que se paga deuda (o sea, se genera deuda para pagar deuda).

Por último, Giuliano incorpora a sus cálculos las deudas que los estados provinciales (incluso la Ciudad Autónoma de Buenos Aires) e incluso municipales tienen contraída de la cual el Estado resulta ser también garante. Lo mismo sucede con la deuda pública de organismos oficiales, empresas del Estado, Fideicomisos Públicos y Fondos Fiduciarios.

Así, la cifra inicial, la que publica el Mecon como la “Deuda Pública Nacional Bruta” de alrededor de 176.000 millones de dólares, se coloca en 293.000 millones de dólares (en miles de millones de dólares se componen así: a los 176.000 según el Mecon se agregan 5.000 de intereses capitalizados + 20.000 por ajuste CER + 32.000 de pagos por crecimiento PBI + 25.000 emitida por BCRA + 15.000 de las Provincias + 20.000 de Municipios y entes nacionales).

En segundo lugar, un argumento que el ministro de Economía, Amado Boudou, suele repetir cada vez que habla del “desendeudamiento” es la relación entre la Deuda Pública y el PBI. Dos consideraciones al respecto. La primera es que el PBI son “bienes y servicios” que el país produce y no dinero disponible para cancelar deuda. Por lo tanto, decir que estamos mejor utilizando ese argumento es como pensar que tendríamos hoy que vender la mitad de lo que se tiene para cancelar la deuda pública. La segunda es que esa relación, que con los datos oficiales sería de 45,8%, tomando toda la deuda no declarada por el gobierno, se coloca en alrededor del 80 %.

Por último, una reflexión acerca de la conveniencia de que la composición de la deuda haya cambiado de manos, pasando de ser casi toda “deuda externa” a ser ahora deuda del Estado con otros organismos del mismo Estado. Ya hemos dicho que en el caso del Banco Central, esa deuda se contrae no para dar líneas de créditos que desarrollen sectores de la economía que potencien la producción nacional, el empleo registrado y los buenos salarios, o para planes de viviendas populares. Se usa para pagar otra deuda. En el caso de la Anses es peor aún porque sus fondos no son parte de los recursos presupuestarios, como son los impuestos u otras rentas. Esos fondos son plata de los jubilados que ellos mismos deberían administrar y decidir sobre su destino.

Cuál es entonces el camino. En primer lugar ser conscientes que el discurso de desendeudamiento cubre en realidad la necesidad de seguir tomando deuda y esa necesidad permitiría suponer que entonces el presupuesto nacional aparece sin déficit cuando en realidad es la deuda que se contrae la que lo cubre.

Sacar de agenda/debate el tema de la deuda es no ver que esto forma parte del modelo al que este gobierno nos convoca a profundizar y defender. El modelo que también admite la expansión del territorio sojero con agrotóxicos incluidos, que levanta a la explotación minera contaminante exenta de todo impuesto, donde la industria automotriz viene siendo la de mayor expansión en estos años (producto suntuario destinado a las clases media-alta) y la actividad financiera una de las de mayores rentabilidades. Un modelo en el cual el impuesto al consumo (paga mas el que menos tiene) es el de mayor recaudación, donde el límite para no ser pobres es que cuatro personas de una familia tipo puedan vivir con 11 pesos por día, donde la brecha entre ricos y pobres pone a un 10 % de los más ricos apropiándose de casi el 29 por ciento del ingreso mientras el que 10 % más pobre solo recibe el 1,8. Un modelo que se sostiene en alianzas con los sectores concentrados y extranjerizados de la economía dentro de los cuales solo 500 grandes empresas reúnen un 22% de lo que el país produce e imponen los precios, un modelo que apaña la burocracia sindical y que tiene alianzas políticas con quienes asesinan a integrantes de pueblos originarios o apalean a trabajadores que reclaman por sus salarios.

Informativo Púlsar 11 y 12/05/2011

12/05/2011 | En esta edición:
Rafael Correa afirma victoria del Sí en la consulta popular. Estudiantes y trabajadores marchan en defensa de la educación pública. Casi el 100 por ciento de los migrantes sufre agresiones en México.

9 min. 55 seg. (9,08 Mb.) bajar mp3

11/05/2011 | En esta edición:
Frenteamplistas responden al Presidente uruguayo sobre la Ley de Caducidad. Exigen aprobar pacto por un México en Paz. Radialistas formalizados en Chile.

7 min. 30 seg. (6,87 Mb.) bajar mp3

 

Informativo Púlsar 13/05/2011

Porfirio Lobo garantizó la seguridad de Zelaya en Honduras. Reprimen manifestaciones contra el proyecto HidroAysén en Chile. Casi 30 % de los alimentos en el mundo se pierden o desperdician. “México vive un momento crítico en materia de Derechos Humanos”.

8 min. 34 seg. (7,84 Mb.) bajar mp3