martes, 7 de septiembre de 2010

El conocimiento y la participación


Si nos detuviéramos un segundo y miráramos a nuestro alrededor, nos daríamos cuenta de que somos muchísimos, miles, con vidas, personalidades y pretensiones diferentes, pero todos en busca de un mismo objetivo, adquirir "conocimiento". ¿Y qué puede ser mejor que miles de jóvenes formándose intelectualmente? La universidad parecería ser uno de los espacios mas propicios con los que cuenta nuestra sociedad para garantizar por medio de la creatividad, la diversidad de ideas, la reflexión, el debate y la acción en conjunto, que las nuevas generaciones comprendan mejor el presente para poder mejorarlo y transformarlo.

Pero para que así funcione hay algo que es clave: la "participación”, o sea, el motor que lleva a cabo todo esto. Si esta no existe, si esta no esta presente en este espacio fértil universitario, la creatividad queda atrapada, las ideas no se escuchan y son silenciadas e interiorizadas, las reflexiones pierden fuerza, el debate no se realiza y la acción esta lejos de encontrar un camino. Y cuando esto sucede, las posibilidades que teníamos de aportar para mejorar como sociedad se diluyen, y dejan la pista libre para que se mantenga inalterable el presente, que muchos de nosotros criticamos. Así la “inacción” no es solo aquello que necesitan las clases dominantes y los burócratas parásitos y corruptos, aquellos que mueven los hilos de nuestras vidas, para mantener sus privilegios y que nada cambie para el resto, sino que es también la causante de que nuestros reclamos no sean oídos, nuestros derechos sean pisoteados y que nuestras problemáticas, nuestros verdaderas problemáticas, nunca sean tratadas por quienes tienen asignada esa tarea.

Nuestra universidad, si bien es muy buena en muchos aspectos, no le escapa a este escenario. La participación vital y sana para el futuro no esta debidamente incentivada, las voces que hablan diferentes son anuladas y muchos eternos burócratas se aferran cómodamente a sus sillones, desarrollando prácticas siempre poco transparentes en función de sus intereses.

Por eso compañeros participar es muy importante… Y si no nos abren los espacios, vayamos a abrirlos nosotros. Si hay cosas que se pueden cambiar, salgamos con propuestas a modificarlos. Y si hay cosas que se están haciendo mal, salgamos sin miedo a decirlo.

Construyamos el rol activo del estudiante.

Construyamos ciudadanía.

Hagámonos sentir.

1 comentario:

  1. Anónimo9/08/2010

    Los estudiantes, no debemos estar al margen de la problemática que significa el transitar por la universidad sin ser parte de la misma, asumiendo una postura pasiva frente a lo dado, por el contrario, debemos ser parte de nuestra universidad, no como un conjunto de estudiantes que pueden clasificarse por carrera, sino como sujetos activos que se ocupan de sus responsabilidades académicas al tiempo que llevan adelante proyectos comunes, colaboran en iniciativas extracurriculares, en la toma de decisiones y proponen formas de crecimiento.

    Nos proponemos repensar la Universidad Pública Argentina, principalmente centrándonos en la realidad particular de la UNTREF, pero también proyectándonos hacia todo el sistema universitario argentino. El eje central de nuestro debate será la participación estudiantil, porque estamos convencidos, que sea cuál sea el paradigma ó la significación que se tome sobre la democratización de la universidad, es imposible que se realice sin la participación activa y comprometida del estudiantado.

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